Cómo elegir el suelo para tu hogar

Si tenemos pensado reformar o crear nuestro hogar desde cero, el suelo es sin duda una de las decisiones que merece la pena tomar con tranquilidad y conocimientos.

Lo más importante es quizá el conocer bien cuáles son las características de cada uno de los materiales que podemos encontrar en el mercado, así cómo saber definir cuáles son nuestras necesidades. Teniendo en cuenta que seguramente éstas son diferentes para cada una de las estancias de nuestra vivienda.

Una vez decidimos los materiales hemos de pasar a la fase de decidir el diseño.

Desde hace muchos años, la madera sigue siendo el material escogido por muchos hogares. Su calidez y la amplísima variedad de tonos así cómo su escaso mantenimiento hacen que este material guste a casi todos.

Aún así hay muchas otras opciones que tienen grandes ventajas como los suelos cerámicos, la piedra, las baldosas e incluso algunos novedosos como el corcho o imitaciones sintéticas.

En el post de hoy te mostraremos algunas propuestas para ayudarte a tomar la decisión y diseñar un hogar que te haga sentir cómodo y responda a lo que estás buscando.

Una de las opciones que suele gustar, por su elegancia y durabilidad, es el gres porcelánico con sus diseños nostálgicos, creando una fiel imitación de los antiguos pavimentos hidráulicos.
Con formas geométricas y ornamentales aportan dinamismo ya alegría a una estancia siendo especialmente fáciles de instalar sobre una superficie trabajada en cemento. Seguro que habías pensado en esta opción ya que son muchos los fabricantes que nos la ofrecen y realmente te dan la oportunidad de convertir alguna de tus estancias en una auténtica obra de arte.

Cómo hemos dicho con anterioridad, cada estancia tiene sus características y no es lo mismo un suelo para una cocina o un baño que para un salón o un dormitorio.

Aunque en muchos hogares el suelo suele estar unificado, las cocinas y los baños casi siempre tienen un pavimiento diferente al resto. Lógicamente las condiciones de humedad, calor, humos y residuos, hacen que la limpieza tenga que ser más frecuente e intensiva, por lo que la durabilidad del material debe poder garantizar un correcto mantenimiento.

La madera, el material estrella, se moderniza cada vez más ofreciendo múltiples estilos, diseños y propiedades, ayudando a que cada uno, desde los más clásicos, hasta los más vanguardistas, encuentren su suelo ideal.
Existen colores, con múltiples tonos, veteados, tipos de parqué, tarima y laminados.

En cuanto a la piedra, ya sea natural o de material sintético de imitación, es un gran clásico que difícilmente dejará de venderse. Sus características la hacen elegante, muestran una belleza única al mismo tiempo que es una opción óptima y duradera.
En esta categoría entrarían los granitos, los basaltos, las areniscas, los mármoles y las pizarras. Materiales todos ellos con gran resistencia a la flexión, la humedad, el calor, la abrasión y el desgaste.

Seguro que no sabías que el corcho puede ser una opción para tus suelos…
Existe un revolucionario material creado por la unión del corcho y el linóleo.
De características blandas, duraderas y ecológicas, resulta un tipo de suelo innovador para hogares modernos que no quieran olvidar la elegancia en sus estancias.

No podemos dejar de lado la elección de los suelos para los exteriores. Ya sea balcón o terraza, sin duda la piedra natural es la opción más recomendable por las características de las condiciones externas.

Es muy fácil de limpiar y de mantener, aunque tiene algunos inconvenientes que hay que conocer:
Según las características de tu elección, puede ser resbaladiza en el caso de lluvia o poco recomendable en zonas de habituales heladas.
Para ello es mejor optar por las opciones sintéticas ya preparadas para solventar dichos inconvenientes, además de tener la ventaja de unos precios más económicos y unos diseños cada vez más reales y bonitos.

Si ya has conocido los materiales más comunes y sus características, ahora es el momento de darte nuestras recomendaciones para que elijas realmente lo que más te conviene.

Las 5 cosas que hay que tener presentes antes de escoger tus suelos:

– El grado de utilización: Debes tener claro el uso que le vas a dar a tus suelos. Si es un suelo muy frecuentado por los miembros de la familia, quizá lo más adecuado sería apostar por los pavimentos de piedra o cerámica. Contrariamente, la madera es una de los materiales más bonitos pero uno de los menos resistentes. Por este motivo es difícil verla en lugares dónde trabaja o transita mucha gente.

– Las condiciones de humedad y temperatura: estas condiciones, cuando se acercan a los extremos, nos ayudan a optar por suelos resistentes que nos ofrezcan garantías de durabilidad. La madera debe estar lejos de zonas que tengan frecuentes cambios de temperatura y una humedad casi constante, ya que la contracción y expansión continua hace que las grietas y el visible desgaste nos obligue a cambiar los suelos en relativamente poco tiempo.

– Las características del contra suelo: Si lo que queremos es tener unos resultados   excelentes es muy importante tener este factor muy en cuenta ya que lo ideal es que el contra suelo esté nivelado y libre de humedad e imperfecciones.
Así como la madera y el suelo cerámico necesitan una superficie virgen, las tarimas flotantes y las baldosas se pueden adaptar a la existencia previa de otros materiales.

– Armonizar los estilos: Este puede ser uno de los factores más difíciles para la mayoría de personas que no nos dedicamos a la decoración. Al existir tantísima variedad de estilos hemos de tener especial cuidado en saber combinar el estilo del pavimento con los elementos decorativos que van a regir las diferentes estancias, muebles, materiales y colores. Por ello es muy recomendable dejarse asesorar por los expertos que nos guiarán si sabemos expresarles nuestras necesidades y preferencias.

– Tu presupuesto y el tiempo del que dispones: Has de saber antes de ponerte a elegir, cuanto estás dispuesto a invertir y conocer si tienes el suficiente tiempo para permitir la instalación, ya que para un tipo de suelo es mínimo, pero para otros nos puede suponer un esfuerzo en los dos sentidos.

Esperamos que te hayamos podido ayudar, aunque sea un poco, a elegir el suelo ideal para tu hogar.

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